Chochín paleártico (𝑻𝒓𝒐𝒈𝒍𝒐𝒅𝒚𝒕𝒆𝒔 𝒕𝒓𝒐𝒈𝒍𝒐𝒅𝒚𝒕𝒆𝒔)

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Gorrión molinero (Passer montanus)

Entre los primeros pájaros que aprendemos a identificar en nuestra vida, por cercanía y cotidianidad, se encuentran los gorriones. Sin embargo, siempre que vemos uno pensamos que es la misma especie, ya sea en la ciudad o en el campo. Y esto no es así. En cuanto salimos un poco de las ciudades, «desaparece» el gorrión común y aparecen otras especies. Entre ellas el gorrión molinero.

Individuo alimentándose de las semillas de un álamo blanco.

A pesar de tener la misma forma que el resto de los gorriones, el gorrión molinero es el más pequeño de todos los presentes en la Península Ibérica. Con machos y hembras iguales, se diferencia del resto por sus «coloretes» negros en sus blancas mejillas y su «gorro» marrón castaño. Engalana estos colores con un collar blanco que desaparece en la nuca.

Progenitor alimentando a su descendencia

Se distribuye por gran parte del Paleártico, desde el Reino Unido hasta la India y Japón, identificándose diferentes subespecies. En España la subespecie presente es la montanus y podemos verla durante todo el año. Se distribuye por toda la Península Ibérica (ausentándose en la zona de Picos de Europa y Pirineos) y las Islas Baleares estimándose una población de más de 2,5 millones de individuos, aunque con tendencia decreciente.

Puede encontrase en un amplio y variado catálogo de ecosistemas diferentes siempre que haya presente algún árbol, ya que es el gorrión más forestal. Entre otros paisajes habita: bosques, vegas, olivares, …

Distribución del gorrión molinero en España. Fuente: SEO Birdlife

Ave omnívora, se alimenta tanto de pequeños invertebrados (sobre todo insectos) como de material vegetal (semillas, frutos, bayas). Durante la época de cría (desde mediados de abril a finales de agosto) ambos sexos alimentan a los pollos de sus 2 o 3 puestas por temporada, principalmente con saltamontes y escarabajos. Los huevos, entre 4 y 7 por puesta, de color blanco o verdoso, son incubados durante dos semanas por ambos progenitores durante el día, y tan solo por la hembra por la noche.

Ejemplar con un saltamontes en la boca a punto de dar de comer a los pollos.

Aunque suelen construir su nido en los huecos de los árboles o en otro tipo de cavidades (arenosas o antrópicas), aceptan de buen agrado las cajas nido, lugares que ocupan con bastante éxito. Con paciencia y distancia es fácil observar a las parejas de gorrión molinero de los alrededores de nuestro centro que han ocupado las cajas nido que ponemos: desde la construcción del nido (con material vegetal y plumas), las cebas de los pollos, hasta los primeros vuelos de los pollos volantones.

¡No dejes que te lo cuenten y ven a visitarnos para observarlos! Pregúntanos en información dónde están las cajas nido y te ayudaremos a que disfrutes de este espectáculo de la naturaleza.

Más información: SEO Birdlife

Grandes migraciones de aves

Aunque muchos animales migran (entre ellos las mariposas y los mamíferos) seguramente sean las migraciones de las aves las más populares y conocidas por todos. Gran cantidad de especies lo hacen y, dada su situación geográfica, en España puede observarse la migración de muchas de ellas. Aunque todas son espectaculares, algunas son de record.

Fuente: https://tienda.seo.org/wp-content/uploads/2022/05/poster-aves-migratorias.jpg

El vuelo migracional más largo realizado durante una migración sin parada es de 13.560 kilómetros y la responsable es la aguja colipinta (Limosa lapponica). Esta distancia no es la total recorrida por el animal durante la migración, sino la más larga recorrida sin parar y es la que separa Alaska de Tasmania. El animal marcado con un GPS, con tan solo 5 meses de edad, recorrió esta distancia por encima del océano Pacífico durante 11 días. Lo que supone una media de 50 km por hora.

Sin embargo, el récord de distancia migracional más larga recorrida durante toda la migración lo tiene el charrán ártico (Sterna paradisaea) que realiza un viaje de 70.000 kilómetros. Durante este periplo, el charrán ártico viaja del polo sur al polo norte en la primera mitad del año para regresar a sus zonas de apareamiento en Groenlandia; y del polo norte al polo sur en la segunda mitad para llegar al mar de Weedell evitando el invierno ártico. En este caso, el animal hace gran parte del viaje por las costas de Africa y Sudamérica para ir descansando. En total, en sus más de 30 años de vida, cada individuo de esta especie recorre una cantidad de kilómetros equivalentes a 3 veces la distancia que hay entre la Tierra y la Luna. Y todo ello con un peso de poco más de 100 gramos.

De todas las especies que atraviesan o llegan a la Península Ibérica durante su migración, seguramente la más espectacular que podemos ver (y oír) y de la que podemos disfrutar en el Parque Regional del Sureste, es la grulla común. Este ave pasa el verano del hemisferio norte en el norte de Eurasia y el invierno en el sur de Europa, Asia y norte de África. En este viaje recorren más de 4.000 kilómetros.

Fuente: Wikipedia. Adaptado de Verbreitungskarte Kranich.png

Desde hace unos años se celebra el Día Mundial de las Aves Migratorias con un montón de actividades para rendir homenaje a todas estas aventureras que surcan los cielos en busca de un lugar donde sobrevivir. Si quieres disfrutar de este espectáculo de la naturaleza puedes buscar la actividad más cercana a tu casa y apuntarte. ¡Participa!

Garceta común (𝘌𝘨𝘳𝘦𝘵𝘵𝘢 𝘨𝘢𝘳𝘻𝘦𝘵𝘵𝘢)

Al ser los ecosistemas acuáticos uno de los elementos principales del Parque Regional del Sureste, las especies de aves de la familia de las ardeidas están muy bien representadas en su superficie. Entre otras especies se encuentra la garceta común, una ardeida de mediano tamaño (60 cm de longitud, 100 cm de envergadura) a la que podemos observar desde uno de los miradores de nuestro centro durante los últimos meses.

Su cuerpo está completamente cubierto por plumas de color blanco que contrastan con el negro de su pico y sus patas y el amarillo de sus dedos y el iris de sus ojos. Durante la época de celo también se observa una pequeña área de piel desnuda situada delante del ojo de color amarillo (que es gris azulado), un par de finas y largas plumas en la nuca y un penacho de plumas filamentosas en el pecho.

Distribuida por prácticamente todo el mundo, en la Península Ibérica habita la subespecie E. g. garzetta que se encuentra sobre todo en las cuencas de los ríos Tajo y Guadalquivir y humedales cercanos a la costa durante todo el año, mientras que las zonas de invernada se distribuyen por todo el litoral peninsular. Le gusta una gran variedad de humedales (siempre que sea de aguas someras y tranquilas), incluyendo los costeros y los de origen humano como los arrozales.

Distribución de la especie en España. Fuente: seo.org

Como el resto de garzas, su alimentación se basa principalmente en animales acuáticos (anfibios, peces e insectos) y, de manera secundaria, otros animales (crustáceos, lagartijas, lombrices, caracoles, pequeños mamíferos y culebras). Captura a sus presas de manera activa llegando incluso a remover el fango de los humedales para levantar las presas de sus escondites y darles caza.

Para su reproducción, la hembra construye nidos de plataforma sobre árboles, arbustos o vegetación palustre con las ramas y tallos que aporta el macho formando colonias mixtas de hasta centenares de parejas junto a garcillas bueyeras, martinetes y otras zancudas. Tras un periodo de incubación de 3 semanas en el que participan ambos progenitores, eclosionan los huevos (de 3 a 5). Cumplido el mes, los pollos abandonan el nido y permanecen entre la vegetación cercana hasta completar su desarrollo completo en mes y medio desde su nacimiento.

Incluida en la categoría “De interés especial” en el Catálogo Nacional de Especies Amenazadas, las principales amenazas que se ciernen sobre la especie son la degradación de los humedales y la reducción de su superficie. Antiguamente fue cazada porque sus plumas eran usadas en la fabricación de sombreros. Aunque el número de individuos de la especie se ha incrementado en los últimos años en nuestro país, su gran dependencia de los arrozales puede suponer un problema en el futuro.

Bibliografía:

seo.org

vertebradosibericos.org

fundacionaque.org

Milano real (Milvus milvus)

Este mes dedicamos la entrada a un ave rapaz que, aunque en los últimos años su población ha crecido un poco, se encuentra en varias categorías de amenaza. En la Lista Roja de la UICN aparece en la categoría de Preocupación Menor, por otro lado, en el Libro Rojo de España y en el Catálogo Nacional de Especies Amenazadas se encuentra En Peligro de extinción. Esto es debido a que en la década entre 1994 y 2004 su población descendió casi a la mitad en España, hablamos del milano real.

Los peores problemas a los que se enfrenta esta especie son las electrocuciones, los atropellos, la caza ilegal, la alteración del hábitat, la menos disponibilidad de alimento o la depredación de sus pollos por otras especies invasoras.

Este ave de mediano tamaño posee un plumaje de tonos rojizos a excepción de la cabeza y el cuello que son de color gris y una mancha blanca en el ala que ayuda a distinguirlo del milano negro durante el vuelo (además de su mayor tamaño y la forma de la cola más ahorquillada). No presenta dimorfismo sexual y los jóvenes son bastante parecidos a los adultos. El sonido que emite es como un chillido agudo que a veces nos puede recordar a un maullido.

Milano real en los cielos del Sureste. Autor: Sergio Llorente

Sus hábitos de alimentación y reproducción son muy similares a los que os contamos cuando hablamos del milano negro.

Y con respecto a su distribución, el 95% de su población total es Europea y en España la población reproductora se encuentra en Castilla y León, Navarra, Extremadura y Aragón. Durante el invierno, se unen gran cantidad de ejemplares procedentes del resto de los países europeos, ocupando más superficie a lo largo de la península. De aquí extraemos que los milanos reales pueden ser tanto migradores como sedentarios, la elección de una estrategia u otra puede depender de la población de origen, el sexo, la edad y también a los intentos de adaptación de la especie para sobrevivir a los cambios que sufre su entorno.

En la monografía del programa Migra de SEO/BirdLife, Migración y Ecología Espacial de la Población Española del Milano Real, encontramos un interesante estudio sobre el comportamiento del milano real en cada momento de su ciclo biológico.

Portada del estudio sobre el milano real en España por SEO/Birdlife.

Entre los años 2009 y 2020 se marcaron 138 milanos reales con dispositivos de seguimiento remoto en distintas localidades dentro del área de distribución de la especie en España. Hasta este momento, se pensaba que la población española de milano real estaba compuesta por reproductores sedentarios e invernantes procedentes de Centroeuropa. Gracias a los datos proporcionados se observó que existía un pequeño número de ejemplares que eran migradores dentro de la Península Ibérica, y también algunos individuos a priori sedentarios que llevaron a cabo ciertos movimientos por la península tras la cría, pero sin la periodicidad característica de la migración. Entre otras cosas, hemos podido saber curiosidades como que:

  • Los machos sedentarios, durante la época posreproductiva, permanecieron en el nido durante todo el año en todos los casos. Sin embargo, hasta un 40% de las hembras sedentarias hicieron largos movimientos a través de la península (entre 40 y 600 km). Este hecho podría deberse a evitar la competencia con sus parejas.
  • Los individuos adultos suelen mostrar áreas de campeo mucho más reducidas que los inmaduros, dada su experiencia en la búsqueda de alimento.
  • Tanto en machos como en hembras, la mayor movilidad se produce durante las horas centrales del día.
  • Los jóvenes suelen compartir áreas de asentamiento temporal durante su dispersión.
  • En la migración de primavera, los adultos requieren de menos tiempo para alcanzar sus destinos y recorren más distancia por día que los inmaduros.

El objetivo de este trabajo es conocer los movimientos en detalle en cada época y que pueden determinar mucha información valiosa para contribuir a la conservación de la especie en cada uno de los periodos.

¡Si quieres saber más te recomendamos que eches un vistazo al libro completo!

Fuentes:

Urios, V. y García-Macía, J. (Eds.) 2022. Migración y ecología espacial de la población española de milano real. Monografía n.º 8 del programa Migra. SEO/BirdLife. Madrid.
https://doi.org/10.31170/0084

https://seo.org/ave/milano-real/

https://elguadarramista.com/2022/05/11/un-nuevo-estudio-revela-datos-ineditos-sobre-la-migracion-del-milano-real-a-escala-europea/

Oropéndola europea (𝑶𝒓𝒊𝒐𝒍𝒖𝒔 𝒐𝒓𝒊𝒐𝒍𝒖𝒔)

A pesar de su llamativo plumaje, es más frecuente escucharla que verla… Aún así, en el entorno del Centro El Campillo sí que hemos tenido la suerte de avistar algún ejemplar de esta especie, la oropéndola europea. Se trata de un ave estival que llega desde África a la Península Ibérica a principios de abril, quedándose algunos ejemplares como parejas reproductoras (en este caso el macho llega unos días antes para establecer su territorio) y otros continuando en tránsito hacia el norte de Europa. Para su estancia tiene preferencia por bosques de ribera y robledales del centro y oeste de la Península cercanos a ríos y arroyos. Y al llegar el mes de agosto comienza su viaje de vuelta.

Oropéndola entre las ramas de un álamo negro en el recinto del Centro El Campillo.

De tamaño similar al mirlo (aunque con un poco más de envergadura) el macho es de color amarillo intenso con alas negras con pico rojizo, patas gris azulado e iris rojo con una banda ocular negra. Sin embargo, las hembras y los juveniles son de color verdoso más apagado, su aspecto puede recordarnos al pito real, así como su vuelo que alterna aleteos y alas plegadas.

Cuando quiere defenderse o expulsar a otras especies como urracas, cucos o incluso busardos ratoneros (de mayor tamaño que estas), emite un fuerte graznido similar al de los córvidos. Pero luego el canto del macho es un silbido melodioso que se puede escuchar a bastante distancia y el de la hembra es menos frecuente, más corto y agudo.

Se alimenta de invertebrados, principalmente orugas, pero también de escarabajos, mariposas, arañas, moscas, saltamontes o abejas. En verano amplia su dieta con frutos del bosque como bayas, higos, cerezas, moras, etc. esto explica su aparición en medios como huertos con grandes árboles frutales, así como en parques y jardines.

La hembra es la encargada de construir el nido, consiste en un pequeño cuenco hecho a base de hierba seca, telarañas o incluso restos de plásticos, que cuelga de la horquilla de una rama de álamo negro y a gran altura, con más probabilidad. Una vez construido, pone de 3 a 5 huevos blancos con manchas oscuras. Normalmente tiene lugar una sola puesta a finales de mayo. La incubación la llevan a cabo los dos progenitores durante unos 16 días. Posteriormente la pareja los alimenta hasta que abandonan el nido tras unas dos semanas.

Oropéndola desde el observatorio del Centro El Campillo.

La oropéndola europea no se encuentra amenazada, aunque los mayores problemas a los que se enfrenta esta especie son los derivados de la pérdida de hábitat en sus zonas de cría, sobre todo por cambios y desaparición de sotos fluviales, o por deforestación y desertificación en las zonas de invernada.

Fuentes:

https://seo.org/ave/oropendola/

http://sendasdemadrid.es/aves/avesdetalle.php?id=290

https://guadarramistas.com/2014/06/27/oriolus-oriolus-oropendola/

https://www.miteco.gob.es/en/biodiversidad/temas/inventarios-nacionales/oropendola_tcm38-100094.pdf

Garza real (𝘈𝘳𝘥𝘦𝘢 𝘤𝘪𝘯𝘦𝘳𝘦𝘢)

Volvemos de nuevo con nuestra Ave del Mes brindando el protagonismo, esta vez, a la garza real. Esta zancuda con el pico en forma de daga, de color gris y moño negro comparte familia con el resto de garzas y garcillas y comparte orden con las conocidas cigüeñas. Las dos bandas negras que le recorren su largo y sinuoso cuello y el capirote que simula una coleta aumentan su contraste con el gris y blanco del resto de su cuerpo en época de celo.

Es muy frecuente encontrarla entre la vegetación, en cualquier río, humedal e incluso algún campo de cultivo de la Comunidad de Madrid. En El Campillo tenemos los ecosistemas idóneos para ellas: tramos de río con un denso bosque de ribera y una laguna con abundante vegetación palustre.

Garza real entre la vegetación palustre de la laguna de El Campillo.

En la Península Ibérica se concentra especialmente en las cuencas del Duero, Tajo, Guadiana y Guadalquivir, en el Delta del Ebro o la Albufera de Valencia. Durante el invierno, su presencia aumenta notablemente debido a aquellas poblaciones que eligen la Península como lugar de destino o de paso en sus migraciones desde las zonas más al norte de Europa. El resto de poblaciones reproductoras europeas son sedentarias o, como mucho, efectúan pequeños desplazamientos.

Ya os contamos anteriormente en nuestro blog las principales diferencias entre la garza real y la garza imperial, aunque comparten muchas similitudes como la técnica de caza o la alimentación. Permanecen inmóviles, junto al agua, hasta que pasa alguna de sus posibles presas, mayoritariamente peces pero en ocasiones también invertebrados, anfibios o pequeños mamíferos. Una vez localizadas, con un rápido movimiento del cuello, las atrapas con el pico y las engulle.

Por los colores puede recordarnos a la grulla común, sin embargo, un detalle sencillo para diferenciarlas es que durante el vuelo las garzas llevan el cuello replegado en forma de «S» al contrario que las grullas que lo llevan estirado, este truco nos sirve también para no confundirla con una cigüeña.

Según el Libro Rojo de las Aves de España 2021 y de acuerdo con los criterios de clasificación de la UICN, la garza real se encuentra en la categoría de «Preocupación menor» (LC). Se podría decir que se encuentra en expansión ya que se ha visto favorecida, entre otras cosas, por la creación de nuevos humedales artificiales o la protección de algunos humedales ya existentes. Lo que sí podrían ser posibles problemas son: la escasez de lugares de nidificación (suele construir plataformas en árboles cerca de los cursos de agua aunque muestra una gran adaptabilidad a los recursos de cada lugar) o la persecución directa, a causa de su dieta ictiófaga y el consecuente rechazo por parte de los pescadores.

Garza posada desde el observatorio del recinto del Centro El Campillo.

Seguro que a partir de ahora cuando visites algún rincón del Parque Regional del Sureste y te cruces con una garza real, te resultará más fácil reconocerla.

Fuentes:

-«Con las aves por la Comunidad de Madrid. Paisajes, Rutas, Guía de Especies.»Consejería de Medio Ambiente y Ordenación del Territorio de la Comunidad de Madrid, SEO/Birdlife

https://seo.org/ave/garza-real/

-https://www.miteco.gob.es/ca/biodiversidad/temas/inventarios-nacionales/garza_real_tcm34-99939.pdf

-«Aves de España» Eduardo de Juana; Juan M. Varela (SEO/Birdlife, Lynx).

-SEO/BirdLife (López-Jiménez N. Ed). 2021. Libro Rojo de las aves de España.

PRISMÁTICOS (III). ¿Qué prismáticos comprar para observar fauna?

Puede que alguna de las veces que has salido al campo hayas mirado con envidia sana a las personas que disfrutan del avistamiento de aves con sus prismáticos y has pensado: ¡tengo que comprarme unos prismáticos! La pregunta difícil e importante viene justo después: ¿Cuáles me compro? En el mercado hay cientos de modelos con una diferencia de tamaños, formas, características y precios que nos hacen dudar cuáles son los mejores para comprarnos.

Lo primero que hay que tener en cuenta es que no todos los prismáticos son los mejores para todo el mundo. Por eso, es importante preguntarse: ¿Qué uso le voy a dar? ¿Cuántas veces voy a utilizarlos? ¿Con quién los voy a utilizar? No es lo mismo ser un ornitólogo profesional que está desarrollando un estudio de campo, que un aficionado a la naturaleza que sale a “bichear” dos veces al mes con amigos; como tampoco es lo mismo saber que solo los vas a usar tú o que los vayas a compartir en familia. En cualquier caso, si los quieres para observar fauna deberán ser prismáticos terrestres y no otro tipo de prismáticos.

En nuestro centro contamos con prismáticos de tamaños y características muy diferentes.

Lo segundo, estrechamente relacionado con lo primero, es el presupuesto que tenemos para invertir en unos prismáticos. De manera general cuanto más caro es un prismático, mejor será, pero seguramente que ni tenemos un gran presupuesto ni todo lo que conseguimos con un gran presupuesto lo vamos a amortizar. En base a las primeras preguntas, piensa cuánto dinero puedes/quieres invertir y busca unos prismáticos que se ajusten a ese precio. Lo más importante al principio es cogerle el gusanillo, familiarizarnos con su uso y ver si realmente los utilizamos y nos hacen falta o no. Si los primeros que te compras los desgastas del uso, invertirás más en el segundo; sino, con los primeros te valdrá. Normalmente los prismáticos tipo porro son la primera opción por su precio (suelen ser más baratos que los de tipo techo).

Garza real observada con prismáticos en nuestra laguna.

En tercer lugar tienes que fijarte en el tamaño y los aumentos. Si son los primeros que te compras lo ideal serían unos de 10×50. Aunque son algo grandes y más pesados, te darán un buen aumento y una luminosidad decente en tus primeras salidas “bicheras”. Si quieres que pesen y abulten un poco menos, puedes elegir unos de 8×42: aunque pierdas un poco de aumento ganarás espacio en tu mochila. Existe la opción de comprar unos compactos de 10×25 o similar, salvo que sean para un niño (tienen el tamaño perfecto para ellos), no lo consideramos buena opción para ver fauna ya que tienen poca luminosidad, son poco manejables para el tamaño de un adulto y no motivan ni a seguir usándolos ni a salir al campo con ellos a “bichear”.

Comparación de tamaño de dos prismáticos: 10×50 tipo porro (izquierda) y 8×42 tipo techo (derecha).

Estos son algunos datos que podemos tener de referencia para la compra de nuestros primeros (o segundos) prismáticos:

  • PRECIO. 50-80 euros de presupuesto (aunque el mercado cada vez es más grande y seguramente que por 30-40 euros encuentres unos que te puedan servir como primer acercamiento).
  • TIPO. Prismáticos de tipo techo. Aunque son un poco más caros que los de tipo porro, también son mas ligeros y ergonómicos. Por su parte, los de tipo porro, a pesar de ser un poco más pesados y robustos que los de tipo techo, suelen tener mejores calidades en su óptica en presupuestos más ajustados y más profundidad de campo.
  • AUMENTOS. Los más recomendables para el avistamiento de fauna son 8×42 o 10×50. Los primeros serán un poco menos pesados y más pequeños (más fáciles de llevar en la mochila) pero los segundos te darán más aumento (permitirán ver a los animales más cerca y ayudarán a diferenciar mejor los colores y comportamientos de los animales cuando no tengamos mucha práctica).
  • TRATAMIENTO LENTES. Preferiblemente como mínimo fully coated (todas las ópticas están tratadas con una capa de fluoruro de magnesio anti reflejante).
  • PRISMAS. A poder ser de tipo BAK-4.
  • OTRAS CARACTERÍSTICAS. Resistentes al agua. Esto no es necesario si nunca sales al campo los días de lluvia, pero si existe la posibilidad, es una característica a tener en cuenta para que no entre agua en la óptica y te duren más.

Como siempre, según a quién preguntes, te dará unos consejos u otros. Estos son los nuestros en base a nuestra experiencia personal pero sobre todo en base a la experiencia compartida con los usuarios de nuestras actividades. Antes de decidirte por unos: pregunta a tus amigos, busca información en la red y ve a las tiendas especializadas a probar diferentes modelos. Encuentra el que más cubra tu necesidades… ¡y a disfrutar de la naturaleza!

Arquitectos del Sureste: Pico picapinos (Dendrocopos major)

Hoy le toca el turno a otro de los pájaros carpinteros más habituales en el Parque Regional del Sureste, el pico picapinos (Dendrocopos major). De tamaño más pequeño que el pito real y coloración blanquinegra, más característica de los picos. Presentan dimorfismo sexual, siendo la parte de la nuca roja en los machos y negra en las hembras. Los jóvenes tienen el píleo rojo, las partes ventrales de color blanco sucio y menor intensidad de rojo en la zona anal.

Los tamborileos son especialmente característicos en el pico picapinos que realizan al alimentarse o al taladrar la madera. Sin embargo, cuando los golpes son muy rápidos y consecutivos son un reclamo para marcar el territorio y para atraer la atención de las hembras.

Suelen emparejarse y criar cada temporada en el mismo lugar, incluso en el mismo tronco, siempre que no haya sido ocupado por otras especies como un estornino o pequeños mamíferos con su familia. La construcción del nido es similar a la del pito real aunque en el caso del pico picapinos este tiene capacidad para trabajar casi cualquier tipo de madera, incluso las más duras, lo que le permite seleccionar una gran variedad de hábitats. La puesta se compone de 4 a 6 huevos, incubados principalmente por la hembra, aunque durante la noche es relevada por el macho hasta los 12 – 16 días.

Su principal fuente de alimentación son larvas de insectos que busca excavando con el pico en la madera, pero en invierno la completan con materia vegetal como frutos secos. Los introduce en un hueco de la corteza de un árbol y va taladrando su cáscara para abrirlos. En las zonas donde hay coníferas recoge las piñas, las lleva a una rama y poco a poco va extrayendo las semillas o piñones para comerlos, después las deja caer al suelo formando un buen montón.

Su Estado de Conservación es de Preocupación Menor en la Lista Roja de la UICN de Especies Amenazadas. Puede verse amenazado por la tala de árboles y la eliminación de troncos muertos que les sirven de cobijo a la hora de anidar, los incendios, o por un cuidado inadecuado de los bosques en general.

Os dejamos con un capítulo de la serie «El hombre y la tierra» donde podréis ver algunas de las curiosidades que os hemos contado en esta y en anteriores entradas de Arquitectos del Sureste:

https://www.rtve.es/play/videos/el-hombre-y-la-tierra/hombre-tierra-fauna-iberica-pajaros-carpinteros-1/5676330/

Fuentes:

https://seo.org/ave/pico-picapinos/

https://hablemosdeaves.com/pico-picapinos

https://www.asturnatura.com/especie/dendrocopos-major.html

Brinzal nos cuenta la situación de la lechuza en la Comunidad de Madrid.

Ya teníamos ganas de volver a ver a Iván García,  Técnico de campo de BRINZAL (Asociación sin ánimo de lucro que se dedica al estudio y conservación de Rapaces Nocturnas) y es que el pasado 20 de noviembre, Iván dio en el Centro de Educación Ambiental «El Campillo» una charla sobre la situación de la lechuza en la Comunidad de Madrid.

La lechuza (Tyto alba) se encuentra en estos momentos en regresión y esto es debido a que su alimentación se centra en micromamíferos (topillos, roedores…) y estos animales se han visto gravemente afectados debido a la agricultura intensiva, pérdida de biodiversidad, desaparición de lindes, el uso de fertilizantes, etc. Además es una especie con gran mortalidad en los ejemplares juveniles ya que, entre otros factores, no son muy buenos cazadores.

Durante la charla Iván nos explicó las tres fases por las que ha pasado el proyecto Alba, el objetivo de la primera de las fases era la compatibilización de los cultivos de secano con las aves nocturnas, en esta fase Brinzal ha realizado el censo de lechuzas en la Comunidad de Madrid obteniendo como resultado 25-30 parejas reproductoras de lechuzas. En la segunda fase, Brinzal se centró en conocer lo que estaba pasando con la lechuza y en averiguar porqué la distribución de la lechuza había cambiado. Y por último, la tercera fase, que se está llevando a cabo en la actualidad y finaliza este año 2021, donde su propósito es averiguar cuáles son las mejores zonas para liberar a estas aves midiendo sus niveles de estrés.

Seguidamente nos contó que las lechuzas crían muy bien en cautividad y que el mejor método para introducirlas en el medio natural es el hacking, así es como se denomina a la «cría campestre», de esta manera las lechuzas desde que son pollos pueden ir aprendiendo a cazar. Como curiosidad, sus cajas nido pesan en torno a los 15 kilos. Para terminar, el público asistente pudo preguntar a Iván todas sus dudas sobre este animal.

Fue una charla muy interesante e instructiva y esperamos poder volver a contar con la presencia de Iván en un futuro cercano.